Paciente caso de colitis ulcerativa y trastorno renal establece precedente clínico en Puerto RicoPor: Belinda Z. Burgos González MSP Noticias- La sala de emergencia del Manatí Medical Center fue el escenario donde hasta ahora, se registró el primer caso de un paciente que padeciendo de colitis ulcerativa, se le descubrió que la condición nefritis intersticial, lo que marca un precedente clínico con la evaluación de los pacientes con Enfermedades Inflamatorias del Intestino (EII, por sus siglas en español) en la isla. Las condiciones de Crohn y la colitis ulcerosa son enfermedades crónicas de los intestinos, incurables, que ocurre en países industrializados con sistemas de salud pública modernos incluyendo Puerto Rico. La prevalencia de las EII son de 38.2 casos por cada 100,000 habitantes en la isla, siendo colitis ulcerosa la más común, según estudio realizado en el 2005 por la Unidad de Investigación de Gastroenterología del Recinto de Ciencias Médicas (RCM). Algunos de los síntomas de la enfermedad pueden incluir diarreas, dolor abdominal, sangrado rectal, fiebre y pérdida de peso. Según explicó en entrevista exclusiva la doctora Laura Rolón Orengo, directora de las clínicas de residencia de Medicina de Familia de la institución hospitalaria y quien investigó el caso en conjunto con el médico residente Bashar Jubran, no es usual que los pacientes con colitis ulcerativa desarrollen este tipo de condición, por lo tanto, dicho caso establece un precedente clínico para la medicina puertorriqueña. La paciente que llegó a la sala de emergencia del Manatí Medical Center fue una joven de 24 años que desde adolescente fue diagnosticada con colitis ulcerativa, condición que hoy día mantiene controlada. No obstante, la paciente comenzó a presentar mareos, fatiga, sangrado por la orina y la hemogoblina baja. Al realizársele los laboratorios a la paciente, reflejó un aumento en la creatinina, análisis de sangre que puede indicar la sospecha de un problema de riñón. Por tal razón, los médicos procedieron a realizarle una biopsia del riñón que identificó la nefritis intersticial en su forma aguda (puede manifestarse de forma crónica). “Esto es bien raro. No es algo que se vea en los pacientes con colitis ulcerativa. Quizás podría desarrollarse en el 3% de estos pacientes, pero no es la norma. Yo llevo 24 años en medicina, y este es el primer caso que yo veo con nefritis intersticial”, subrayó, quien aclaró que la nefritis intersticial puede desarrollarse en otras condiciones y por efectos secundarios del uso de antibióticos. “Tenemos que pensar que si un paciente con colitis ulcerativa llega con este tipo de síntomas como sangre en la orina al hospital, puede que tenga nefritis intersticial. Tenemos que hacer evaluaciones más profundas en los pacientes porque un daño en un riñón es algo serio. La nefritis intersticial puede conllevar un fallo renal. Esto fue un caso aislado que se investigó porque no es usual verlo”, apuntó. De otra parte, la doctora Rolón Orengo exhortó que al menos cada seis meses los pacientes con colitis ulcerativa se realicen pruebas de funcionamiento renal. Asimismo, indicó que propondrá que levanten estadísticas sobre la nefritis intersticial ya que no existe suficiente data sobre la condición en la isla. “Presentaremos este caso en la Fundación Esther A. Torres, que promueve la concienciación sobre las condiciones inflamatorias del intestino. Para mí fue un choque que me topara con esto porque llevo años tratando esta paciente ya que nunca había presentado esta estadística”, finiquitó. [Publicado en MSP, julio 2015] |